La buscadora de sonrisas está de vuelta.
Primero felicitaros a todos la Navidad y desearos que este nuevo año que está a punto de empezar nos venga cargado de paz y amor.

Cada día que pasa me doy más cuenta de que en este mundo son muy pocos los que imitan a Jesús con su humildad. No entiendo porque las personas no son capaces de hacer obras por el mero hecho de ayudar. Pues no, siempre quieren quedar por encima, resaltando todo lo que hacen e incluso a veces, lo que no se hace.

Hoy en día hay muy pocas personas dispuestas a sacrificarse por otras, es un mundo egoista, en el que todos miramos para nuestros cuellos, sin ser capaces de mostrar una mano amiga al que lo necesita. Te juzgan por lo que tienes y no por lo que eres. La mayoría no se da cuanta de que en cualquier momento la tortilla puede dar la vuelta y que tenemos que ser más coherentes.
Ayer en un informativo, me llamó la atención una persona que se quejaba porque se había emancipado y con su sueldo de mileurista pues que se veía mal porque no le llegaba pues quería tener más cosas. Yo pensaba, caray, tiene un sitio donde vivir y un trabajo, pero no le llega....

No sé pienso que la gente solo mira lo material y nada más y la humildad que predicó Jesucristo, está olvidada.

El nos enseñó el camino de la humildad
bajando para subir, visitando a los que yacían en lo bajo y
elevando a los que querían unirse a El»

No os olvidéis de esto, porque al fin y al cabo es lo que importa.